Agencia de Noticias Chiclayo Brennan Barboza Bravo.- El acoso político representa uno de los principales impedimentos que enfrentan las mujeres para participar de manera plena en la esfera pública. En el Perú, luego de la promulgación de la Ley de Paridad y Alternancia N° 31030, la presencia femenina en el Congreso de la República se ha incrementado significativamente, las cifras oficiales de la ONPE indican que 52 mujeres han alcanzado un lugar en dicho poder del Estado, lo que equivale a poco más del 39%. Esta cifra es superior a los anteriores periodos, desde que la mujer puede ser electa como congresista.
Asimismo, de acuerdo con el documento elaborado por la Dirección Nacional de Educación y Formación Cívica Ciudadana (DNEF) del organismo electoral, tras las Elecciones Regionales y Municipales 2022, resultaron elegidas 102 alcaldesas, de las cuales ocho corresponden al ámbito provincial y 94 al distrital; 23 mujeres lograron el cargo de vicegobernadoras regionales y dos de gobernadoras (Lima y Moquegua). De estos datos se puede destacar que la presencia de la mujer en los espacios y cargos públicos sigue incrementándose, pero este incremento crea una reacción, esta reacción es lo que genera el acoso político.
El informe sobre acoso político a candidatas en procesos electorales, realizado por el Jurado Nacional de Elecciones en Perú, indica que, en el año 2018, el 24% de candidatas ha sufrido acoso político. Lo que revela que una de cada cuatro candidatas a nivel subnacional ha sufrido acoso político. El mismo informe señala que, durante las elecciones congresales 2020 y 2021, una de cada dos candidatas postulantes en las Elecciones Congresales Extraordinarias 2020 y las Elecciones Congresales 2021 ha sufrido acoso político durante su trayectoria política. En ambos años, quienes perpetraron los actos de acoso político fueron hombres (44% en 2020 y 46% en 2021). La burla y la difamación son los tipos principales de acoso que viven las postulantes al Congreso durante su carrera política.
La politóloga en Movimiento Manuela Ramos, Elizabeth Herrera, indica que el acoso político ha sido visibilizado por el aumento de la participación de mujeres en cargos públicos; no obstante, esta modalidad de violencia, señala, es una reacción a la mayor presencia de las mujeres en la política y lo que busca es expulsar a las mujeres por su condición de mujeres del espacio de poder y de decisión.
Según la especialista, para que el acoso político sea visible se ha requerido de mucho esfuerzo a través de los años, pues recién en el año 2021 se aprobó la Ley para Prevenir y Sancionar el Acoso Contra las Mujeres en la Vida Política Ley 31155, sin embargo, menciona, esta norma requiere mejoras pues carece de sanciones claras, es decir, enfatiza la experta, se ha logrado la fase uno de visibilización e identificación de la problemática; faltando alcanzar la fase dos, que corresponde a las sanciones.
La coordinadora del Programa para la Igualdad Política del Jurado Nacional de Elecciones, Parwa Oblitas, menciona que los resultados de las encuestas que desarrolla el ente electoral sirven para mostrar evidencia de la problemática y evaluar alternativas ante el acoso político. Además, señala que, efectivamente, el acoso político es una reacción y se debe al grado de machismo que existe en la sociedad, puesto que, por muchos años el espacio de poder y de decisión ha sido masculinizado y, por ende, el sistema patriarcal desea expulsar a las mujeres de estos espacios públicos.
La especialista señala que las candidatas cuentan que las amenazas y difamaciones que reciben afectan su vida íntima, familiar y su imagen. Además, indica que, en los casos analizados, se ha podido ver una carga de estereotipos de género, pues se vincula a las candidatas con actividades que históricamente han sido destinadas a mujeres como es el hecho de vender o preparar comida; es decir, se llega a cuestionar la capacidad de las mujeres ante cargos públicos, y se tiende a señalar que solo están de relleno.
Por último, Parwa Oblitas menciona, que desde el Jurado Nacional de Elecciones se han venido desarrollando programas de formación y prevención ante el acoso político, registro de casos para orientar a candidatas, campañas de sensibilización y actualmente, refiere, se cuenta con la plataforma web Observa Igualdad, que tiene una pestaña específica donde se habla del acoso político.
Frente a la magnitud del acoso político que nos muestran las encuestas y registros mencionados, se hace necesario enfatizar la responsabilidad colectiva nacional, como las instituciones públicas que atienden, brindan orientación y dan seguimiento a los casos de acoso político para que estos no queden ocultos e impunes.
En el marco de la Estrategia Nacional de Prevención de la Violencia de Género contra las Mujeres “Mujeres libres de violencia”, se impulsa un trabajo multisectorial desde la familia, la escuela, las instituciones públicas, las empresas y los medios de comunicación que cumplen un rol fundamental en la prevención de la violencia basada en género, buscando deconstruir estereotipos de género, fomentando la igualdad entre hombres y mujeres y brindando información de los servicios y canales de ayuda, con el apoyo de AECID y UE.